* 200 ml de agua fría
* 1 cucharadita de sal fina
* 500 g de mantequilla a temperatura ambiente
* 150 g de harina de fuerza
* 250 g de harina normal
* 1 huevo batido
* 1 cucharadita de sal fina
* 500 g de mantequilla a temperatura ambiente
* 150 g de harina de fuerza
* 250 g de harina normal
* 1 huevo batido
Elaboración:
Poner
el agua fría y la sal en un bol y dejar que se disuelva lentamente.
Fundir
en un cazo 75 g de mantequilla.
Colocar en un cuenco la harina de fuerza y la corriente, añadir el agua salada y la
mantequilla fundida,
removiendo con regularidad, pero sin amasar demasiado.
Formar una bola, aplastarla entre las manos, envolverla en film transparente y dejarla reposar 2 horas en el frigorífico.
Cortar el resto de la mantequilla en trocitos, depositarlos en un cuenco y ablandarlos con una espátula hasta que tengan la misma consistencia que la bola.
Formar una bola, aplastarla entre las manos, envolverla en film transparente y dejarla reposar 2 horas en el frigorífico.
Cortar el resto de la mantequilla en trocitos, depositarlos en un cuenco y ablandarlos con una espátula hasta que tengan la misma consistencia que la bola.
Enharinar levemente la
superficie de trabajo y extender la bola con el rodillo hasta un grosor de 2
cm, dejando más altura en el centro que en los extremos, formando un cuadrado
de ángulos bien rectos. Poner la mantequilla en el centro.
Plegar
la masa en tres, como para formar un sobre rectangular, y dejarla reposar
2 horas en la nevera.
Girar la masa 45º, extenderla en un rectángulo del mismo tamaño que el anterior y plegarlo en tres como la primera vez. Dejar reposar la masa nuevamente durante 1 hora como mínino en la nevera. Proceder del mismo modo hasta haberlo hecho 6 veces, de dos en dos, dejando reposar la masa cada vez 2 horas en el frigorífico.
Conservar la masa en el frigorífico hasta que tengamos que usarla.
Para preparar los croissants, sacamos la masa de la nevera y la cortamos en 3 trozos.
La
extendemos sobre una superficie enharinada y, con el rodillo, la amasamos en un
rectángulo. Cortamos triángulos, de arriba a abajo por toda la masa.
Girar la masa 45º, extenderla en un rectángulo del mismo tamaño que el anterior y plegarlo en tres como la primera vez. Dejar reposar la masa nuevamente durante 1 hora como mínino en la nevera. Proceder del mismo modo hasta haberlo hecho 6 veces, de dos en dos, dejando reposar la masa cada vez 2 horas en el frigorífico.
Conservar la masa en el frigorífico hasta que tengamos que usarla.
Para preparar los croissants, sacamos la masa de la nevera y la cortamos en 3 trozos.
Cojemos
un triángulo de la parte más ancha y procedemos a enrollar con la palma de la
mano. Tiene que quedar todo el tríangulo enrollado con la punta
hacia arriba.
Doblamos
un poco los extremos del croissant y lo colocamos en una bandeja de
horno.
Hacemos
los mismo con el resto de triángulos. Pintamos con huevo batido e introducimos en el horno precalentado a 190ºC durante 15-20
minutos, o hasta que veamos que la masa está crujiente y los croissants dorados.